Expertos enfatizan sobre las precauciones que se deben tomar para evitar el contagio y la diseminación de la enfermedad.
Del 5 al 21 de agosto, se harán los XXXI Juegos Olímpicos 2016 en Río de Janeiro, Brasil, y un grupo de 150 especialistas de instituciones como las Universidades de Oxford, Harvard y Yale elaboraron un documento alertando sobre la amenaza del Zika como un factor que debe ser tenido muy en cuenta. Incluso sugirieron la postergación del evento o un cambio de sede, ya que consideran que constituye un peligro para los asistentes por la potencial propagación de una epidemia si contraen el virus y luego lo trasportan a sus países de residencia.
“Es importante que en este momento las máximas autoridades sanitarias a nivel mundial abran las puertas al debate científico y al intercambio de ideas, escuchen todas las voces y, finalmente, compartan con la comunidad sus recomendaciones”, dijo la doctora Ester Polak de Fried, médica especialista en Fertilidad y Docente autorizada de Ginecología y Endocrinología Reproductiva de la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires.
En zonas de Zika
Más allá de este debate, todas aquellas personas que visiten cualquiera de las zonas con presencia del virus, deben tener muy presentes algunas precauciones, como: estar atentos a la aparición de posibles síntomas como fiebre, rash cutáneo, dolores articulares y/o musculares, conjuntivitis y cefaleas, entre otros. Aunque en la mayoría de los casos la infección del virus del Zika puede cursar con muy baja o sin ninguna sintomatología.
Puntualmente en mujeres embarazadas expuestas al virus, se han registrado casos graves de microcefalia en los recién nacidos. “Si una mujer está embarazada y desarrolla algunos de los síntomas descriptos dentro de las dos semanas de haber vuelto de un viaje a una zona donde se hayan reportado casos de Zika, debe hacer una consulta urgente con su médico o con el servicio de guardia más cercano a su domicilio”, insistió Polak.
El virus del Zika puede contagiarse mediante la picadura de un mosquito (del género Aedes) que funciona como vector entre una persona y otra, e incluso mediante transmisión sexual. Permanece en la sangre del individuo infectado aproximadamente durante una semana y, si bien no se sabe con exactitud aún, se cree que el período de incubación, que es el que transcurre desde la exposición al virus hasta la manifestación de los síntomas, oscila entre 2 y 7 días.
Ante un caso de infección, el paciente debe ayudar a que se evite la propagación de la enfermedad, y puede hacerlo asegurándose de que no lo piquen los mosquitos y, en caso de tener relaciones sexuales, haciéndolo con protección mecánica, mediante el uso del preservativo.
“Se consideraba que el mayor riesgo durante la gestación se presentaba en el primer y segundo trimestre. Sin embargo, la información actual pareciera ser aún peor: un estudio realizado por investigadores brasileros y publicado en marzo en el New England Journal of Medicine, indica que el Zika podría causar graves daños en algunos fetos, independientemente de cuándo se contrajo el virus durante el embarazo”, comentó la doctora, directora del CER (Centro Especializado en Reproducción).
Los resultados de esta investigación, que tiene una muestra de 88 mujeres embarazadas, concluyen que muchos de los fetos de mujeres infectadas con Zika desarrollaron trastornos graves en el desarrollo, incluyendo problemas en su crecimiento, cabezas muy pequeñas, desórdenes cerebrales, disrupciones del sistema nervioso central y flujo sanguíneo anormal.
Cómo cuidarse del Zika
Paralelamente, basándose en lineamientos publicados por el CDC (Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades) de los Estados Unidos y la Administración de Drogas y Alimentos (FDA) del mismo país, un grupo de especialistas de la Sociedad Americana de Medicina Reproductiva (ASRM) difundió entre sus miembros los siguientes lineamientos y sugerencias para el cuidado de mujeres y hombres en edad reproductiva con riesgo de exposición al virus del Zika:
* Las mujeres enfermas con síntomas de infección con el virus del Zika, deben esperar al menos 8 semanas del inicio de los síntomas, para intentar embarazarse. Mientras que los hombres enfermos con síntomas deben esperar al menos 6 meses desde el inicio de los síntomas.
* Las mujeres y hombres con posible exposición al virus del Zika, pero sin síntomas, deben esperar al menos 8 semanas de terminada la exposición, para intentar el embarazo.
* Estos mismos periodos de tiempo deben utilizarse en parejas que estén por efectuar tratamientos de fertilidad con sus propias gametas (óvulos y espermatozoides).
* Con respecto a los donantes de gametas, se propone no seleccionar posibles donantes hasta después de 6 meses luego de haber padecido la enfermedad o haber tenido alta posibilidad de estar expuesto al virus.
* Con respecto a los test que existen del virus del Zika, se consideran aun complicados de realizar e interpretar, no están universalmente disponibles y no se recomienda en la actualidad los test serológicos en forma rutinaria.
* En aquellas áreas de transmisión activa del virus del Zika, se aconseja utilizar métodos anticonceptivos muy seguros para prevenir embarazos no deseados.
* Finalmente, se recomienda que los médicos deben aconsejar y educar a sus pacientes sobre el Zika.
“Con relación al tratamiento, consiste solamente en trabajar sobre algunos de los síntomas: se indica reposo, tomar mucho líquido y utilizar sólo analgésicos como el acetaminofén o el paracetamol. No se debe tomar aspirina ni otros antiinflamatorios no esteroides, ya que existe riesgo de sangrado”, advirtió la Polak.